transportes autónomos PostBus. © PostBus

Talento suizo aplicado a la innovación tecnológica en vehículos autónomos

Imaginen reservar un autobús por celular para ir a trabajar. Nos recoge en la puerta de casa; no tiene conductor, pero conoce el camino y encuentra una ruta alternativa si hay un embotellamiento. Incrementar el uso de vehículos autónomos para complementar el transporte público: esta es la visión de Anne Mellano. La joven ingeniera suiza es la cofundadora de Bestmile, una start-up exitosa que crea software innovador para la gestión de vehículos autónomos y convencionales.

Este año Bestmile obtuvo el segundo puesto en el premio que reconoce a las 100 mejores startups suizas. La empresa con sede en Lausana se encuentra entre las empresas prometedoras que surgieron de la Escuela Politécnica Federal de Lausana (EPFL), uno de los principales polos de investigación tecnológica de Suiza. Anne Mellano, que fundó la compañía junto con Raphaël Gindrat, comenzó a trabajar en vehículos autónomos durante su primer empleo en una oficina de planeamiento urbano. La joven ingeniera de transporte estaba a cargo de uno de los primeros proyectos de movilidad autónoma de Europa.

 

Anne Mellano

Los dos estudiantes dirigieron el experimento de transportes autónomos en el campus de la EPFL, lo que les permitió obtener valiosos conocimientos sobre el tema. Gracias a esta demostración financiada conjuntamente por Suiza y la Unión Europea, la empresa se puso en marcha de inmediato. En la actualidad, Bestmile cuenta con unos 60 empleados y oficinas en Lausana y San Francisco. Su tecnología innovadora es utilizada por servicios de transporte público en algunas ciudades suizas como Sion y Ginebra. Recientemente la empresa fue seleccionada como parte de un equipo para supervisar el proyecto AVENUE de la Unión Europea para probar el uso de vehículos autónomos en el transporte público.

Self-driving shuttle operated by PostBus
Los transportes autónomos en la ciudad suiza de Sion funcionan con la ayuda del software de Bestmile. © PostBus

Una mentalidad innovadora

Anne posee una maestría en ingeniería civil de la EPFL, pero sostiene que su elección de carrera no estuvo motivada por una estrategia específica sino que más bien quería aplicar su talento para las matemáticas a una tarea concreta. “Primero quería ser profesora de matemáticas”, dice. Pero luego se dio cuenta de que necesitaba algo menos teórico y se anotó en ingeniería civil. Cuando terminó sus estudios de grado, Anne se especializó en transporte porque buscaba áreas innovadoras de la ingeniería. “Mi meta no era trabajar en una empresa de ingeniería del transporte normal. Creo que la mentalidad que tenía en ese momento es lo que me hizo llegar adonde estoy hoy”.

Suiza se cuenta entre los países más innovadores del mundo; sin embargo, solo el 14,5% de las empresas suizas fueron fundadas por mujeres. Anne cree que el motivo es el bajo número de estudiantes mujeres en el sector tecnológico. “En el primer año de ingeniería civil éramos seis mujeres de un total de 140 estudiantes” recuerda, agregando que las seis mujeres se encontraban entre los 55 estudiantes que se graduaron. En Suiza, las instituciones públicas y el sector privado ofrecen a los emprendedores numerosas posibilidades de financiamiento y visibilidad.  El premio a las 100 mejores startups suizas es apenas uno de los numerosos premios que permiten que las empresas emergentes ganen visibilidad. El Foro Económico Mundial, que tiene sus propios premios, colocó a Bestmile en la lista de las 61 empresas pioneras tecnológicas más prometedoras de este año.

De proyecto piloto a start-up

Para Anne, su primer empleo en una oficina de planeamiento urbano en Lausana fue una experiencia decisiva. Su propuesta fue seleccionada como parte de un proyecto de investigación europea para una demostración durante 8 meses de vehículos autónomos en el campus de la EPFL. Esto le inspiró la idea de crear una empresa de gestión de una flota de vehículos autónomos con Raphaël, quien ya estaba probando el primer transporte autónomo para la universidad. “Allí pudimos comprender rápidamente que estos vehículos son muy inteligentes. Eran capaces de ir del punto A al punto B, pero faltaba algo: los vehículos no se comunicaban entre sí”, explica Anne. Los dos estudiantes se dieron cuenta de que un servicio de movilidad con vehículos autónomos necesitaba alguna forma de inteligencia colectiva que le brindara una visión de la actividad en todo el sistema.

4.	Bestmile co-founders Anne Mellano and Raphaël Gindrat with the first autonomous shuttle of EPFL
Los cofundadores de Bestmile Anne Mellano y Raphaël Gindrat con el primer transporte autónomo de la EPFL. © Bestmile

Anne y Raphaël fundaron Bestmile en 2014 para manejar la demostración de los vehículos universitarios al año siguiente. Seis minibuses autónomos iban a brindar transporte en el campus de la EPFL durante 8 meses. El éxito no estaba asegurado. “El objetivo inicial era realizar el experimento y al final veríamos qué sucedía. Tal vez volvíamos a hacer lo que hacíamos antes, porque nos daríamos cuenta de que el sistema aún no estaba listo”, comenta Anne. Pero gracias a la demostración, Bestmile se aseguró sus primeros clientes y obtuvo financiamiento. “Fue realmente una gran ventaja que el primer año ya estuviera totalmente reservado, y sabíamos lo que teníamos que hacer”, recuerda Anne.

Bestmile co-founders Anne Mellano and Raphaël Gindrat
Anne Mellano y Raphaël Gindrat, cofundadores de Bestmile. © Bestmile

Vehículos comandados a distancia

El software de Bestmile consiste en una plataforma que permite que los operadores de vehículos autónomos y convencionales planifiquen rutas, vinculen los vehículos con los pasajeros y gestionen el mantenimiento de la flota. Está conectado a los vehículos a través de un sistema en la nube: “No tenemos nada dentro de los vehículos, ni hardware ni software. Todo pasa por la nube”, explica Anne. Las empresas de transporte escogen las partes que necesitan del software y las adaptan a su servicio. El software envía una misión al vehículo, por ejemplo, circular por una ruta determinada con paradas específicas. Sin embargo, la ejecución de la misión es manejada por el vehículo mismo con el hardware y el software que tiene en su interior. Por lo tanto la tecnología responsable por la seguridad del vehículo se encuentra fuera del alcance de la plataforma de Bestmile. Anne estima que el uso del software para automóviles convencionales ayudaría a los usuarios a efectuar la transición hacia los autos autónomos: “La idea es que los clientes aprendan a usar la plataforma en autos convencionales y luego puedan agregar vehículos autónomos”.

Una de las opciones que propone el software de Bestmile es enviar vehículos a demanda cuando los pasajeros los solicitan a través de aplicaciones. Esto podría muy bien aplicarse a los viajes en tren en Suiza en el futuro. Bestmile inició un proyecto con los Ferrocarriles Federales Suizos (SBB) que apunta a integrar vehículos autónomos en el servicio de transporte ferroviario. “La idea es que cuando uno reserva un pasaje de tren a través de la app de SBB, uno podrá reservar el transporte para el último tramo del viaje. El transporte nos esperará en la estación de tren para llevarnos al destino final”, explica Anne.

2.	The self-driving shuttles operated by PostBus, a subsidiary company of the Swiss Post, can carry up to 11 passengers.
Los transportes autónomos operados por PostBus, una subsidiaria del Correo Suizo, pueden llevar hasta 11 pasajeros. © PostBus

Transporte público simple para todos

Anne espera que algún día el uso de los vehículos autónomos sea algo común y llene los vacíos especialmente en aquellas zonas que hoy no están cubiertas por el transporte público. “Nuestra visión no es reemplazar los sistemas de transporte masivos sino complementarlos”, dice y agrega que la posibilidad de contar con un servicio flexible para el tramo final del viaje alentará a la gente a no usar sus automóviles. “Imaginen el futuro: tomamos el teléfono, solicitamos un vehículo. Llega a nuestra puerta, nos lleva a destino y luego desaparece. No tenemos que preocuparnos por tener combustible suficiente o contar con neumáticos especiales para el invierno. Tampoco tenemos que preocuparnos por encontrar estacionamiento”.